EDITORIAL

El cambio de comportamientos de la sociedad es un conflicto de intereses, políticos y económicos, para bien o para mal, para Dios o para el diablo.

Los grandes medios contribuían a la educación, enseñándonos a respetar. Hoy, con todas las técnicas de memorización y  de pedagogía a su alcance, los grandes medios reiteran a la humanidad la importancia y necesidad del irrespeto, de la irreverencia, del odio, de la inconformidad y de la violencia, en contra de quién sea. Para bien o para mal. Para Dios o para el diablo.

Las iglesias eran los lugares de enseñanza del respeto, la caridad, la contrición y el amor al prójimo. Hoy nadie parece vivir en ellas, con horarios y condiciones tan limitadas y precarias como los de las oficinas de atención al público. Para bien o para mal. Para Dios o para el diablo.

Nacimos en el mundo de las tres autoridades reconocidas, eclesiásticas, civiles y militares, las cuales eran objeto de respeto y obediencia impecables. Hoy, son hazmerreíres y objetivos de abucheos. Para bien o para mal. Para Dios o para el diablo.

Un mundo que confiaba la justicia en las leyes y normas aplicadas por las correspondientes instituciones del Estado. Hoy, la inseguridad jurídica y la picardía ha hecho de las leyes una especie de gelatina y de las instituciones otra de melcocha.  Para bien o para mal. Para Dios o para el diablo.

Cualquier situación, levemente parecida a lo que hoy está ocurriendo, antes era motivo para el inminente cierre de un gran medio o de un colegio o universidad o una iglesia o para tumbar el gobierno de turno, o en todo caso o al menos, para que se diera un tenebroso toque de queda. Hoy, simplemente es una oportunidad política o económica. Viva la apertura económica y la democracia. Para bien o para mal. Para Dios o para el diablo.

Un mundo donde nos enseñaban que cada día hay que crecer más y más. Siquiera que después de los 25 no se crece más. Si no, la tediosa tarea de bajarle el ruedo a los pantalones, al compás del crecimiento diario. Para bien o para mal, de nuestros queridos y apreciados sastres.

—————————————————————————————————-

FOTO DE PRESENTACION MERAMENTE DECORATIVA, TOMADA DE LA PAG WEBhttps://www.freepik.es/fotos-premium/revolucion-mexicana-1910-fotografia-editorial-blanco-negro_83095260.htm#query=algarabia&position=19&from_view=keyword&track=sph&uuid=f3570694-97e6-4f61-be0a-4ee054b5698c

1 Comentario

  1. María es la madre del Dios encarnado. Cuando el Hijo De Dios, por voluntad de Su Padre y de Él mismo, se quiso encarnar por Obra del Espíritu Santo. Este es un misterio y así lo debemos aceptar. Nuestra mente humana no lo alcanza a comprender. Como Cristianos y como católicos debemos aceptar. @tamayo_g

Comments are closed.