POR: ALFONSO PÉREZ GUTIÉRREZ

Colombia, de por sí y a través de los tiempos, ha sido un país violento.

Últimamente, esta violencia ha ido en crecimiento, será quizás por las próximas elecciones presidenciales, vaya uno a saber.

Hace unos meses, cuando en todo Colombia se dieron las famosas marchas, resultaron varios muertos, pertenecientes a personas de dichas manifestaciones, y estaban perturbando el orden público.

A raíz de este suceso, se vinieron las ONG, las comisiones de derechos humanos internacionales, pasando por todos hasta la misma ONU, a protestar por la muerte de estas personas, aduciendo que fueron asesinadas por la fuerza pública, no sé si con razón o no, la fuerza pública se defiende.

Así mismo ha ocurrido varias veces, que cada que la fuerza pública da de baja a un supuesto delincuente, le caen todos encima.

Hace poco en un caserío, creo que en Amazonas o vichada, se hizo un operativo y fueron dados de baja once supuestos guerrilleros, y sin enterrarlos, cayeron todos los que enumere antes, para crucificar a los militares que realizaron dicho operativo.

Hace tres o cuatro años, mataron más de 20 jóvenes en la escuela de infantería en Bogotá, cada tres o cuatro días, en las regiones apartadas, matan dos tres soldados, ya es rutina, esta semana asesinaron vilmente a 5 soldados en frontino, Antioquia, etc.

Hasta el día de hoy, no he visto una ONG, o alguna organización internacional de derechos humanos, o una marcha, o algo, protestando por la infame muerte de estos militares.

Definitivamente la fuerza pública está muy desamparada, caso contrario ocurre con las otras personas.

Duro, pero es la realidad.

COLETILLA. Realmente no se sabe quien legisla, si la corte constitucional o el congreso