LAS JUGADITAS DE EPM CON LAS TARIFAS DE SERVICIOS PÚBLICOS

Por: JAIRO HERNÁN RAMÍREZ GÓMEZ

El alcalde, cuando estaba en campaña electoral fue protagonista al entregar una porción de queso al anterior gerente de EPM en una de las sesiones del concejo municipal. Pero parece ser que guardó el resto de la porción para dar gusto a su exquisito paladar, según se comentaba en otra de las sesiones del concejo de Medellín donde se discutía la venta de las acciones de EPM en UNE Telecomunicaciones, negada otra vez, por la desconfianza que genera el alcalde en la mayoría del concejo, la cual se acentúa más si se tiene en cuenta que entramos en un año de campaña electoral.

También en campaña, como una jugadita, prometió congelar las tarifas de servicios públicos, promesa que no se cumplió y por el contrario se observan en esta administración incrementos tarifarios anuales, aún con pandemia, superiores a los de 2019.

Estos dos eventos llamaron la atención y cautivaron a sus electores que hoy lo tienen en tan digno cargo.

Han sido varias las protestas por los incrementos en tarifas de energía, especialmente en la costa, en Cali y en Bogotá que han llevado al gobierno nacional a estudiar y analizar, con los agentes del mercado, propuestas para minimizar los impactos generados. Antioquia en cambio se nota pasiva como ha sido su tradición, pero sí, muy activa en el cumplimiento del pago de facturas.

Fue así como, en la primera semana de septiembre, en forma anticipada, el gerente de EPM anunció desde Cartagena en congreso de Andesco, la decisión de bajar el costo de las tarifas a los usuarios y de manera inmediata (desde el próximo mes) y también se comprometió a rebajar al mínimo permitido los incrementos tarifarios hasta que salgan las medidas anunciadas por el gobierno nacional.

Resulta qué, al contrario de lo anunciado por el gerente en septiembre, en octubre llegaron las facturas con incremento en las tarifas de energía hasta del 8.5% en un solo mes, en otras facturas se nota el mismo incremento repartido en dos meses, de agosto a octubre. Como se desprende, el resultado fue todo lo contrario a lo anunciado, esta la otra jugadita con las tarifas.

Resulta qué, a octubre 2022 en el último año se han incrementado las tarifas de energía hasta 27.6%, las de acueducto hasta el 20%, las de alcantarillado hasta el 17% y gas hasta el 14%, con mayor afectación a los estratos 3 al 6, a los desempleados y a los pensionados en todos los estratos. Sorprende el incremento en las tarifas de acueducto del 20% en un año de invierno y de aguaceros permanentes.

Para ilustración, el incremento en el salario mínimo de 2021 a 2022 fue del 10.07% y el incremento de las pensiones que superan un salario mínimo de 2021 a 2022 fue del 5.62% (IPC para el año 2021).

Se observa que los incrementos en tarifas de servicios públicos superan con creses los incrementos en el salario mínimo y el IPC. Si se toma como referencia el servicio de energía, se concluye que su incremento del 27.6% de tarifas en el último año fue 2.7 veces el incremento del salario mínimo y 5 veces el incremento a los pensionados.

De seguir estas tendencias de incremento desbordado en tarifas llegaremos en corto plazo a un conflicto y protestas sin precedentes. En el caso de los pensionados mayor impacto, porque en el corto plazo los incrementos tarifarios de los servicios públicos absorberán los incrementos pensionales.

Se resalta que los incrementos en la tarifa de energía se indexan a futuro, lo que en otras palabras significa que a los usuarios que se les incrementó en el ultimo mes el 8.5%, según parece ser, recibirán un alivio en el 4% por el termino de un año, pero las tarifas según se percibe seguirán en aumento, no se congelan. Al termino de un año el alivio se suspende y se continuara con la indexación tarifaria, como de costumbre, y el 4% que estuvo a favor durante un año hará parte de nuevo, pero esta vez en contra.

Es por lo anterior que EPM debe ser muy concreta y precisa, con claridad meridiana sobre los alivios en las tarifas y definir de una vez si se acoge o no, al pacto planteado por el gobierno nacional y sacar a Hidroituango de cualquier presión como mecanismo de negociación.

Estas cifras son las que invitan a cambiar la regulación tarifaria vigente, mejor ahora que tarde y reta a todas las empresas del sector para que cambien y mejoren sus modelos de gestión y crecimiento.

En el caso de EPM, el esfuerzo es mayor, ya que se acostumbró en los últimos quince años a generar ingresos a costa de incrementos tarifarios, más que a los resultados de sus inversiones sin control por fuera de la región, y peor, recurriendo a su capacidad de endeudamiento que en su momento era del 20%, hoy en el 40% con altos cargos por el servicio de la deuda.

TODOS LOS ANTIOQUEÑOS UNIDOS CONTRA LA CORRUPCIÓN

JAIRO HERNÁN RAMÍREZ GÓMEZ