Por: CR(RA) HORACIO LEMA GALIANO
Hoy como padres y abuelos de esta generación que se erige como la dueña de la degradación del ser humano y aumento incontrolable de la maldad, dirigimos la mirada a lo alto pidiendo perdón. Actualmente encontramos un sinnúmero de escritos, columnas de opinión en los medios y librerías del país donde desarrollan temas relacionados sobre política, economía, corrupción, ideología de género, populismo, pandemia, la falsa paz, la JEP y muchos temas más. Pero son muy pocos o nada los escritos que llevan un mensaje a las nuevas generaciones, exponiendo reglas de conducta y comportamiento sustentadas en valores, principios y convicciones para formar una mejor sociedad. Los ministros de educación y padres de familia de la nación dejaron en manos de organizaciones innecesarias y corrompidas como FECODE, la educación de sus hijos, y lo más grave es que, estos remedos de educadores reciben el más alto presupuesto de la nación, 44.2 billones sin nada a cambio ya que, su destrucción en las ciudades esta estimada en un valor de más de 1000 millones de pesos por cada paro ilegal que realizan. Están utilizando tus hijos y nietos para hacer política partidista. Solo traen al estudiante ruina espiritual y psicológica y un país sin educación sostenida es un país paria. Esta organización despreciable sigue caminando a pasos agigantados como un cáncer con metástasis que, sigue causando daños irreparables en la educación de todo un país, sin que nadie a nivel gobierno tome medidas para detenerlo. Por eso tenemos hoy como resultado llanto, sufrimiento y frustración viendo a diario una generación que no respeta a sus padres y que difícilmente pueden respetar a las autoridades legales de la nación. Esta generación no defiende el honor el hogar y su patria. Con relación a la pandemia del coronavirus esta misma es donde más ha demostrado su irrespeto y ausencia de amor por sus mayores, debido a su actitud irreverente han contaminado a padres y abuelos, por no acatar las normas de aislamiento obligatorias, causando un número significativo de muertes entre ellos. Esta generación es la misma que culpa de sus fracasos a los que luchamos por su bienestar y lo dimos todo. No aceptan su asombrosa mediocridad creen que todo son derechos y no deberes. Gracias a la malformación que recibieron en su educación su ADN está lleno de resentimiento y odio, contra quienes conforman el motor productivo del país, que generan progreso y bienestar a quienes trabajan y buscan su propio progreso familiar y personal. Esta generación es la misma que permite que asesinos, violadores y narcos legislen a través de las corporaciones públicas del estado desconociendo los verdaderos intereses del pueblo que NO los ha elegido.
Esta generación asume que el mundo y la sociedad les deben mucho y lo exigen de la peor forma asumiendo una actitud de vándalos callejeros. Es la misma que no sabe discernir lo bueno de lo malo en forma objetiva y respetuosa, por eso hacen lo que ellos creen que es lo correcto independientemente de afectar de forma significativa a los demás, confunden sus derechos con sus anhelos personales, y por eso se corrompen. Esta generación es la que ha desnudado el asesinato de hijos a padres y padres a hijos, niños indefensos. Esta generación de pendejos ha marcado su destino basados en el maltrato intrafamiliar, abuso sexual de niños y niñas menores en su mayoría, drogadicción, aborto y música metálica salida de todo contexto musical. En los últimos cinco años han sido asesinados por sus progenitores 128 menores y 22 madres y tres madrastas han asesinado a sus hijos. Esta generación se levantó sin temor a Dios y lo más preocupante es que es simplemente el comienzo de un final catastrófico, donde la libertad y las buenas costumbres desaparecen y dan paso a personajes tan siniestros como los comunistas, que a través de la degradación del ser humano buscan llegar al poder. Todos los excesos hacen mucho daño y por eso vemos hoy en esta generación una justicia que le rinde honor a la desaparición del estado nación. Jueces irrespetuosos que burlan la jurisprudencia sin asomo de temor, profesionalismo, ni vergüenza. Producen fallos sin sustento jurídico a favor de la delincuencia rampante que hoy crea tanta desesperanza en el país. Una Corte Suprema que insiste en llevar al país al nivel de impunidad nunca visto en la nación incluso peor que la JEP. Estos jueces corruptos es lo peor que le puede pasar a un país. Esto que está pasando no es ni siquiera de posiciones políticas cómodas como las que utilizan los populistas para destruir el país, echando mano a la materia prima disponible. Estudiantes que pertenecen a las 32 universidades públicas del país y son algo más de dos millones quinientos mil, que utilizan el paro continuo como una materia más del pensum académico. Han contaminado la libertad de pensamiento, han secuestrado el alma y las neuronas de los estudiantes y no producen nada positivo a la sociedad. Así mismo, ideologizados por la federación comunista de educadores se lanzan al mercado universitario cada año aproximadamente ciento cincuenta mil (150.000) bachilleres y técnicos que, llegan con la idea equivoca de la educación; apoyar y promover paros para seguir siendo una de la más pobre educación académica del continente. Hay que ser responsables y no dejar en manos de los irresponsables que quieren debilitar las instituciones para presentarse como solución al estilo Petro o Cepeda, y convertir al país en otra Venezuela. Estos personajes son lobos rapaces con piel de oveja de los cuales nos debemos cuidar todos. Hoy está claro que el personaje más siniestro, destructivo y cínico que lidera el GLOBALISMO en el país y en el continente que, utiliza esta generación de pendejos, para continuar destruyendo la sociedad, es Juan Manuel Santos, que incluso confundió y desarticulo mediante engaños uno de los mejores ejércitos del continente, el EJERCITO COLOMBIANO. Seguramente todo el daño que ha hecho se le devolverá por la vía que el Dios Todopoderoso disponga. Las campañas de desprestigio y violencia de esta generación están en sus códigos y ahí se quedarán hasta que desaparezcan como humanos representantes del mal. Lo más preocupante de este tema es que organizaciones como la ONU, OMS y demás burocracias son quienes, desde sus sillas escondidos, agazapados, mercaderes del comunismo internacional proponen normas inconvenientes para presunto cumplimiento en los países miembros, relativas a políticas en materia de aborto, movimiento LGTB, creencias espirituales, libertad y libre empresa. Normas que van en contra de la formación y principios de los ciudadanos de bien y familias que siguen sosteniendo a pesar de todo la base de la sociedad. Aquí hemos tratado de identificar el MAYOR PROBLEMA del país que es causa de nuestra mayor frustración como ciudadanos de bien. LA FORMACIÓN Y LA EDUCACIÓN QUE TERMINA CON EL 2020
CON EL CONOCIMIENTO SE LOGRA LA SALVACIÓN CON LA IGNORANCIA LA CONDENACIÓN
CR(RA) HORACIO LEMA GALIANO
Enviado desde mi iPhone
