Por Luis Fernando Gil Monsalve

En la Asamblea de Antioquia se calientan los ánimos entre los diputados Verónica Arango y Juan David Muñoz. En el recién inaugurado escenario político de la Asamblea, la confrontación de ideologías y perspectivas ha capturado la atención desde el primer día. Con 26 diputados asumiendo sus funciones el pasado 1 de enero, la mayoría de ellos representan al uribismo, un grupo político que encarna la seguridad democrática y una doctrina guerrerista que ha dejado cicatrices históricas en forma de muertes, desplazamientos y falsos positivos, entre otras.

En medio de esta pugna, el gobernador del Centro Democrático -que no tiene nada de centro ni menos de democrático, entiéndase lo que hizo el partido con las mesas directivas sin cumplir el estatuto de oposición en Concejo y en Asamblea-, Andrés Julián Rendón ha propuesto la creación de frentes de seguridad como medida para abordar los desafíos actuales. Sin embargo, este enfoque no está exento de controversia, ya que hace tan solo tres décadas, los frentes de seguridad gestaron las Convivir, cuyo legado fue ejecuciones extrajudiciales, matanzas de inocentes y miles de víctimas sólo en Antioquia.

No obstante, la representante de la facción uribista, Verónica Arango, ha lanzado acusaciones incendiarias, utilizando términos como “vamos desde la Asamblea Departamental de Antioquia, a trabajar sin descanso, para que estos criminales tengan cárcel o muerte, sí es necesario”, palabras textuales tomadas del ulterior link. Este lenguaje polarizador amenaza con socavar el diálogo necesario y desvía la atención de los problemas cruciales que la Asamblea debería abordar en beneficio de los ciudadanos.

https://www.instagram.com/reel/C1pc9mVREgS/?igsh=MW9oNWM3Y3ZuYWthNg%3D%3D

Por otro lado, el joven diputado Juan David Muñoz hace un llamado a la paz, al consenso y a no destinar energías a la guerra, citando a la Comisión de la Verdad, recordando que Antioquia es el departamento con más víctimas: 125.980. Invitado desde el Recinto a apoyar la Paz Total del Gobierno Nacional. En medio de este escenario tenso, es crucial preservar un espacio para el diálogo constructivo y la colaboración. La diversidad de opiniones y enfoques puede ser la fuerza motriz detrás de soluciones más equitativas y efectivas para los problemas que enfrenta Antioquia.

https://twitter.com/juandavidmuoz22/status/1742663128200941605?t=GYZveLg_rAq9wmQ_zP1VyA&s=08

La propuesta del gobernador Rendón plantea desafíos significativos, considerando la historia de los frentes de seguridad en la región. La sociedad civil, consciente de las consecuencias pasadas, mira con atención cómo los diputados abordan este tema y si logran trascender las diferencias superficiales para trabajar juntos en busca de un futuro próspero y equitativo para todos los habitantes de Antioquia.

En este crucial momento para Antioquia, los ciudadanos se enfrentan a una elección trascendental entre dos visiones. Por un lado, la opción guerrerista, arraigada en una historia de dos siglos marcada por la violencia, desplazamientos y tragedias. Por otro lado, la alternativa de respaldar la apuesta a la Paz Total del gobierno, una oportunidad para romper con el ciclo de confrontación y buscar soluciones que promuevan la reconciliación y el desarrollo sostenible. Ante este dilema, es crucial reflexionar sobre el pasado para forjar un futuro más pacífico y próspero para Antioquia. La decisión recae en cada ciudadano, y es el momento de elegir un camino que lleve a la construcción de una sociedad justa y armónica.