“La palabra utopía no puede estar en el diccionario de un dirigente con visión de futuro”…
Por: Misael Cadavid MD
No hay lugar a dudas que las grandes ciudades deben buscar mecanismos alternativos de movilidad que sean amigables con el medio ambiente, en donde la recuperación del espacio público para los peatones y el fortalecimiento del transporte público sean el Gold estándar en la dinámica citadina, sin embargo la ciudad de Medellín que carece de espacios para ampliar o construir nuevas vías y contribuir a darle celeridad a la movilidad en una ciudad en donde los embotellamientos son el común denominador, es menester retrotraer una vieja idea de la construcción de un segundo piso vial a lo largo del río Medellín.
Esta propuesta surgió en el año 2007 por Luis Pérez, para combatir la inmovilidad que sufren los habitantes metropolitanos. Sería un macro proyecto de infraestructura que revolucionaria la forma de movilizarse en Colombia.
En aquel entonces a través de un video se ilustró claramente cómo son los Segundos Pisos Viales y se demostró claramente que sí es posible la construcción de dos autopistas aéreas a lado y lado del Río Medellín, desde Bello hasta Sabaneta y viceversa.
La construcción de la obra, permitiría la reducción de la contaminación, mejoraría la calidad de vida y hasta se le pondría fin al pico y placa, además estaría complementada con miradores y zonas más seguras, tranquilas e iluminadas, parques con fuentes de agua, árboles y flores, vías peatonales, ciclovía y una vía sólo para motos.
La inversión en su construcción podría ser a través de la figura de la concesión y el pago de peaje.
Este sería un proyecto novedoso y único en el país que solucionaría, de una vez por todas, los problemas de movilidad y tráfico en los que hoy se encuentra inmersa la ciudad.
El próximo Alcalde de la ciudad debe pensar en grande y ofrecer soluciones de largo plazo en un ambicioso plan de movilidad vial.
Es hora de construir un segundo piso vial para Medellín.
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