Bogotá, 24 mar (EFE).- Miles de personas salieron este martes a las calles de ciudades colombianas, pese a que en muchas de ellas está prohibido, para abastecerse o pedir ayuda al Gobierno en vísperas del inicio de la cuarentena de 19 días con la que se busca frenar la expansión del COVID-19.

En el caso de Bogotá, donde rige desde el pasado viernes un aislamiento ordenado por la Alcaldía que termina hoy, desde temprano hubo aglomeraciones en estaciones del sistema de autobuses Transmilenio, especialmente en el vecino municipio de Soacha, donde muchos alegaron que se dirigían a sus trabajos.Otros hicieron filas en los supermercados, que son de los pocos comercios autorizados a abrir, para comprar comida y artículos de higiene, temerosos de que no puedan hacerlo hasta el 13 de abril, cuando termina la cuarentena.

“Es mejor salir hoy porque a partir de mañana la cosa se va a poner más complicada”, dijo a Efe Diego Martínez, un ciudadano que esperaba paciente su hora de entrar en un supermercado de cadena en el norte de Bogotá.

ADVERTENCIAS DEL GOBIERNO

Las disculpas de la gente para salir de casa en Bogotá después de cuatro días de encierro contra el coronavirus merecieron una advertencia del ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo.

“El aislamiento preventivo no es un juego ni una recomendación, es una obligación y por eso nuestra fuerza pública está desplegada para hacer cumplir esta medida, así como las demás que ha dispuesto el Gobierno nacional”, aseguró el ministro en una rueda de prensa virtual.

Por su parte, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, hizo un llamado a la Policía, a la Alcaldía de Soacha y a la Gobernación de Cundinamarca para que “hagan cumplir los controles” del aislamiento preventivo, que se enlazará a la medianoche con la cuarentena obligatoria nacional que irá hasta el 13 de abril.

“La terquedad de algunos ciudadanos no reducirá la propagación del COVID-19. Si continúan las aglomeraciones en Transmilenio el Distrito (de Bogotá) tomará medidas como suspender definitivamente el servicio. Esto no es un juego, es responsabilidad de todos”, denunció a su vez el concejal Samir Abisambra.

En Colombia hay 306 personas contagiadas con el COVID-19, tres fallecidos y seis recuperadas, según datos del Ministerio de Salud.

Bogotá, con 114 casos, es la ciudad que tiene más infectados de COVID-19, seguida de los departamentos de Antioquia, con 52; Valle del Cauca (37), Bolívar (16), Risaralda (14), Cundinamarca (13) y Huila (11).

PEDIDOS DEL SECTOR INFORMAL

A la Plaza de Bolívar de Bogotá, centro del poder político de Colombia, llegaron hoy centenares de personas, entre inmigrantes venezolanos sin empleo y trabajadores informales, para pedir a la Alcaldía ayudas que les permitan sobrevivir durante los días de cuarentena.

Según datos oficiales, en Colombia hay más de 5,6 millones de trabajadores que obtienen su sustento de la economía informal, y en las ciudades alcanzan una tasa del 47 % de la fuerza laboral, con lo cual la cuarentena les priva de su medio de subsistencia.

En la concentración de hoy, los manifestantes, unos pocos usando mascarillas, para prevenir el contagio, se reunieron alrededor de la estatua del Libertador Simón Bolívar y protagonizaron un conato de enfrentamiento con la Policía que fue rápidamente controlado.

“Somos artistas urbanos, dependemos de un diario para cubrir nuestras necesidades. Acatamos las normas pero no tenemos recursos para sobre llevar la cuarentena (Necesitamos comida)”, se leía en una pancarta exhibida por un imitador del cantante Carlos Vives.

Al respecto, la alcaldesa aseguró que en “casi todas las ciudades grandes ha habido hoy concentraciones exigiéndole al Gobierno Nacional un ingreso básico para familias pobres sin el cual ellos que no podrán cumplir” la cuarentena.

“La garantía de ese ingreso es lo que esperamos que algún decreto nacional diga”, añadió en sus redes sociales.

INMIGRANTES Y POBRES ENGAÑADOS

Algunas estaciones del Metro de Medellín (noroeste) también estaban hoy atiborradas y, al igual que en Bogotá, decenas de personas, la mayoría sin tomar las precauciones de sanidad, llegaron al Centro Administrativo La Alpujarra creyendo que la Alcaldía iba a distribuir ayudas.

“Engañados por una cadena falsa de WhatsApp, decenas de venezolanos vienen a La Alpujarra a reclamar 60.000 pesos (unos 14,5 dólares) que supuestamente les iba a dar la Alcaldía. Increíble que en estos momentos algunos quieran jugar con la esperanza de la gente”, manifestó el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, en Twitter.

En Cali (suroeste), el alcalde Jorge Iván Ospina también pidió a la gente que se quede en casa y les advirtió: “No tiremos por la borda el aislamiento necesario para evitar el contagio”. EFE

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