El palpitar del ser

Dentro de un cuerpo late un palpitar fuerte

Que desgarra la mesa donde se alimentan almas

Siguiendo una mirada, tras un ideal personal

Que choca con la fe, que se cree prohibido

Como un fruto agridulce, la pasión arde

Ante el otro, esa calabaza bella y fluida

Que habla del dueño, del control que ejerce

Dejando a un lado toda misión, toda razón

La adrenalina se desborda, se diluye en agua

Y un extraño ser, anida en todo cuerpo.

Lo que eres

Un día común y corriente

en mi ingenuidad,

siento mi alma desarmada

y la unidad se me escapa.

Me vuelvo una sombra

y el desespero me abraza

hasta llegar a cero

en toda intención fracasada.

Pero deseo ser

parte de ese gran acontecer,

ver lo que eres en esencia

y aplaudir con gratitud y reverencia.

Anhelo tener la oportunidad

de caminar en el sendero del orbe,

donde el amor no sea ardor

sino la guía para cada hombre.

Aunque vaya tras la incertidumbre,

y la sinrazón del yo me rodee,

cada verso escrito me señala

una sagrada familia cósmica que nos aguarda.

Y así, en esta búsqueda constante,

de encontrar lo que eres en verdad,

renuevo mi fe en el amor,

que me guía hacia tu claridad.