Por: Emperatriz Echeverry Arenas
Ser mujer madura es una maravilla,
es el mejor regalo que la vida me da,
es disfrutar momentos,
es ser feliz sin miedos,
es contemplarlo todo
es amar con delirio
es vivir de con sueño
es vivir si afanes
es regalarme todo.
Jamás yo cambiaría
a mis grandes amigos,
a mi familia hermosa
errada como yo,
tampoco esos amores
que llevo en mis recuerdos
grabados como un sello de luz y de destello que me siguen por siempre y que jamás se olvidan, Jamás yo cambiaría mi amada Cañasgordas de gente, buena y noble que vive rodeada de bosques y montañas de un cielo azul celeste, diáfano y transparente que cruza sin fronteras toda la inmensidad.
Aunque he cambiado mucho,
mi esencia sigue intacta,
me gusta ser amable,
me encanta sonreír,
servir a los demás,
he aprendido a quererme
también a perdonarme
a ser como soy yo
sin criticarme tanto,
con todos mis errores,
también con mis aciertos,
con todos mis defectos,
también con mis valores.
Soy mi mejor amiga,
me cuento mis secretos,
me río mi misma
de todos mis defectos,
a veces lloro y río
de tantos desengaños,
que aún con estos años,
no he podido olvidar.
Me como lo que quiero,
camino por doquier,
abrazo sin cesar
bailo sin descansar
me encanta a mí besar
digo lo que yo siento
lo que me dé la gana
conmigo está quien quiero
más no quien quiere estar.
Amo la libertad
respeto, admiro y quiero.
él se lo merece
soy fiel, sincera y tierna
con ese amigo leal.
Camino por la playa,
descalza, despeinada,
sin afán me sumerjo
en esas tibias aguas
que acarician mi piel
me meto entre las olas
inquietas juguetonas
en cada amanecer.
Ignoro las miradas
los comentarios necios
de aquellos callejeros
que no saben qué hacer.
Olvido las tristezas,
también los malos ratos
solo dejo conmigo
lo bueno, lo más grato
alejo de mi vida
lo malo, lo perverso
lo que me ha hecho daño
lo que me hace sufrir.
Mi corazón se ha roto
se ha vuelto a restaurar
estará siempre dispuesto
amar y a perdonar
por qué… un corazón inmaculado, estéril no sabe que es amar.
Lo que la gente piense de mí
ya no me importa
yo ya no me cuestiono
me puedo equivocar
no rindo cuenta a nadie
respondo por mi actos
quien me quiere, lo quiero
lo mismo ya me da.
El día que me vaya
quiero irme tranquila
no quiero que me llores
no quiero que estés triste
solo quiero que sepas
que estoy agradecida con
DIOS y con vida
por tantas alegrías
y por tu compañía
que ha sido solo mía.
Septiembre 28 de 2021.
Emperatriz Echeverry A.