Bogotá, 2 mar (EFE).- Al menos 361 indígenas de la comunidad embera, que llegaron a un parque de Bogotá desplazados por la violencia, regresaron a sus lugares de origen en los departamentos de Risaralda y Chocó, informaron este miércoles fuentes oficiales.

El secretario de Gobierno de Bogotá, Felipe Jiménez, dijo en un comunicado de su despacho que en la noche de este martes y la madrugada de este miércoles se “realizó un tercer retorno a sus territorios, de 361 indígenas que viajaron a la vereda (caserío) Dokabú, de Pueblo Rico en Risaralda y a Bagadó y Carmen de Atrato en Chocó”.La coordinación de la operación estuvo a cargo de la Secretaría de Gobierno, la Alta Consejería de Víctimas, y la Unidad para las Víctimas.

Según Jiménez en los últimos tres meses han retornado más 1.600 miembros de las comunidades embera dobida, katío y chamí a sus lugares de origen, de donde salieron desplazados por el conflicto armado.

“Es con diálogo y concertación que hemos logrado el regreso de estas comunidades a sus lugares de origen”, aseveró Jiménez.

La Alcaldía de Bogotá facilitó a los indígenas 12 autobuses para el viaje de regreso. Además también prestó cinco camiones que transportaron 40 toneladas de enseres.

La Secretaria de Salud, por su parte, realizó valoración médica a los integrantes de cada grupo familiar verificando que estuvieran en buenas condiciones de salud para el viaje.

Este es el tercer retorno que se ha hecho. El 1 diciembre de 2021, 460 indígenas regresaron a sus territorios ancestrales y 19 días después lo hicieron alrededor de 800 personas.

El Distrito hizo un llamado al Gobierno Nacional a revisar las condiciones de vida de las comunidades indígenas en todo el territorio, pues si no hay seguridad para desarrollar sus proyectos comunitarios, su regreso a Bogotá se puede repetir.

Igualmente, la Alcaldía de Bogotá le ofreció a otros indígenas que hace más de tres meses se tomaron el Parque Nacional Enrique Olaya Herrera, en pleno corazón de la capital colombiana, trasladarse al Parque La Florida en donde se les puede brindar una mejor atención en salud y alimentación.

Esos indígenas, también de la comunidad embera, llegaron al Parque Nacional a la espera de reubicación y soluciones ante la violencia que viven en el selvático departamento del Chocó (fronterizo con Panamá). EFE

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