“El sistema educativo en Colombia está lleno de desigualdades e injusticias”.

Por: Jaime Humberto Ramírez Cadavid*

John Roemer (1998) utiliza la metáfora del juego entre dos equipos de futbol (azul y rojo) en el que el campo está inclinado a favor del equipo azul, para referirse a ciertas condiciones que determinan las circunstancias y el medio social de las personas.   Por razones más que obvias, aunque los dos equipos tengan capacidades y jugadores con destrezas, le será más fácil anotar a equipo azul

Esta desigualdad de condiciones se evidencia en nuestro sistema educativo, donde por lo general los mejores puntajes en los resultados de pruebas internas y externas, los obtienen los colegios de la clase alta y adinerada de este país y los estudiantes de clases menos favorecidas obtienen resultados bajos o mediocres. Esto permite evidenciar que los pobres estudian con los pobres y los de mejor condición económica en colegios privados adinerados.

¿Qué hacer por los que están menos aventajados?

La educación impartida en Colombia ha presentado falencias y problemas a lo largo  de toda la historia, y en cada década se ha buscado e implementado distintas estrategias para mejorarla. La preocupación más reciente es que los niños sean educados en, y para la paz, no solo en el colegio, en la casa y en el contexto social. En los colegios se debe simplemente enseñar, ya que el educar lo deben realizar todos los habitantes del país.

Los esfuerzos del ministerio de educación no cesan, programa de alimentación temprana, todos a aprender, construcción y mejoramiento de aulas y colegios, implementación de jornada única, – cabe señalar que la jornada única no debe ser más de lo mismo, sino un plus para los estudiantes, que adquieran algún tipo de competencia, habilidad o destreza o el aprendizaje de un idioma adicional- programas como volver a la escuela, dotación a los colegios y apoyo para la profesionalización del profesor, la autonomía del colegio y buen liderazgo,  entre otras,  estrategias impulsores claves del cambio y la mejora en la calidad de la educación.

Mejorar la calidad de la educación requiere el desarrollo de políticas sostenibles que reconozcan la importancia de crear buenos conocimientos, buenas habilidades y actitudes positivas hacia el aprendizaje durante toda la vida tan pronto como sea posible. Que se garantice el acceso, la permanencia y finalización de la vida escolar. utilizando políticas educativas basadas en la equidad, la intervención temprana y ayudando a los alumnos a planificar su futuro y ser protagonistas en su propio aprendizaje.

Infortunadamente para Colombia, esta desigualdad, se incrementó con la llegada del COVID- 19. Esta pandemia aisló a niños y jóvenes de las instituciones educativas, por casi dos años.

La gran preocupación de los administradores de la educación, desde las Secretarías de Educación fue poder llegar a todos, que no se aumentara los índices de deserción pero que tampoco se atrasara el proceso educativo, aunque era de esperarse que este no se podía garantizar para todos a control remoto o con guías impresas. Todo esto tuvo un alto costo para el país se tuvo que invertir en unos recursos adicionales que no estaban presupuestados, lamentablemente para la sociedad en general, la pandemia dejó evidenciar el atraso cada vez más marcado en las desigualdades sociales, económicas y por ende en el aprendizaje.

El Ministerio de Educación en Colombia se vio enfrentado a varios retos, para garantizar al menos la terminación del año escolar de todos los estudiantes matriculados.  Por medio de distintas reformas y estrategias, el proceso educativo se flexibilizó de tal manera que se pudiera dar continuidad desde las casas. El uso de distintas herramientas digitales, audiovisuales e impresas, fue clave para llegar a todos los estudiantes.

Es de señalar el trabajo desde las Secretarías de Educación que de la mano con el Ministerio de Educación lograron aunar esfuerzos para mejorar la crisis. Resaltar el trabajo también de los y las Subsecretarios (as) de Educación, en especial el trabajo de la doctora Luz Ayda Rendón Berrío en Antioquia, a quien vimos en reportajes muy dispuesta a garantizar el retorno a las aulas de clase en condiciones aptas, que gracias a su pasión, dedicación y buen enfoque y profesionalismo hicieron un buen equipo de trabajo.

*Jaime Humberto Ramírez Cadavid. *Especialista en Ciencias Sociales y Políticas Consultor y Asesor en Calidad Educativa