Por Iván de J. Guzmán López

Sin sentarse a llorar sobre la leche derramada (cosa que no es poco decir si nos atenemos a los retos que plantean la pandemia y el paro), el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, en cabeza del doctor  Rodolfo Enrique Zea Navarro y el apoyo de sus Viceministros, todos comprometidos con el campo, como el doctor Juan Camilo Restrepo Gómez, por ejemplo, crearon la estrategia del  Mercado campesino virtual, para apoyar la venta de productos del campo de manera local. Sin duda, es una estrategia a tono con la época y la tecnología, y es sinónimo de productos frescos,  buen precio, relacionamiento amistoso y ciudadano, a más que abastecimiento seguro y a la mano.

Esta oportunidad de venta y compra, a mi modo de ver, es una estrategia básica si entendemos que la pandemia exige distanciamiento y la protesta ciudadana (que en términos pacíficos, ordenados y respetuosos es un derecho) puede conducir al desabastecimiento. Esta metodología de mercadeo, que aprovecha la inmediatez y popularidad de las redes sociales, enmarcada en la campaña #AbastecimientoSeguro, crea una vitrina sumamente importante, mediante la cual cualquier ciudadano puede anunciar su cosecha. Básicamente, consiste en un directorio virtual para que el Ministerio pueda conectar a productores con compradores de la misma región, y así, fácilmente, puedan comercializar sus cosechas, beneficiando al comprador y evitando pérdidas al productor.

La estrategia del Mercado campesino virtual, está sustentada en la obligación que siente el Ministerio por garantizar el abastecimiento de los hogares colombianos. Al tenor, dijo el señor Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural: “Las movilizaciones no pueden obstaculizar los bienes de primera necesidad como los alimentos. Somos respetuosos del derecho constitucional de la protesta, pero es importante permitir el paso de los alimentos a las diferentes ciudades y centros poblados que lo necesitan, con el fin de que las personas puedan contar con un ‘Abastecimiento Seguro’ de los productos que cosechan nuestros campesinos. No hacerlo es atentar contra la vida y la salud de los colombianos”.

La invitación especial, dice que: “Cualquier persona que tenga conocimiento de alguna cosecha represada, puede, a través de las redes del Ministerio de Agricultura, mandar la información con datos como: nombre del productor o asociación; dato de contacto; tipo de alimento o producción; cantidad represada; lugar de Colombia donde se encuentra y foto del producto, (Twitter: @MinAgricultura; Facebook: Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural; Instagram: @minagriculturacol) y así dicha información será pública y empezará a hacer parte de ese directorio virtual, el cual se espera que mucha gente lo comparta, consulte y compre local”.

El link, para entrar de forma rápida, a un sólo clic, es:

https://app.powerbi.com/view?r=eyJrIjoiM2E5NWRjMmUtNWU4ZS00NTM0LWE2MjEtMTJhNGNiYjY1YzgzIiwidCI6IjE4YmUyZGEyLTg3MmItNGJkYi05OGE4LWQ5NDA0Y2RkZGMwMCIsImMiOjR9

Otra acción muy importante, en este sentido, consiste en la disposición y tarea inmediata del Minagricultura en el contacto con empresas interesadas (que no son pocas) en productos del campo, para que  puedan acceder a este directorio y apoyar estos mercados locales, mediante el Programa de Agricultura por Contrato.

No hay duda de que pasamos por un momento difícil de la patria, y por tanto es nuestra obligación preservar la democracia. La vieja frase de cajón, dice que “Las personas pasan y las instituciones quedan”.  Es obligación nuestra, el preservar y fortalecer la democracia, y hacer a un lado a quienes no hacen la tarea democráticamente. ¡Para eso es el proceso electoral!

Estas acciones, prácticas y necesarias del Minagricultura y sus colaboradores, son muestras de amor a la democracia, al Estado de derecho, y al compromiso por la tarea hecha democráticamente y con respeto por nuestros ciudadanos y productores del agro. ¡Adelante, señor Ministro y Viceministros de Agricultura! Colombia lo agradece y valora.