De Generación

 

Arturo Tabares M

El progreso no consiste en aniquilar hoy al ayer, sino al revés, en conservar aquella esencia del ayer que tuvo la virtud de crear el hoy mejor”, Ortega y Gasset.

Que han hecho los jóvenes de hoy,  que se creen tanto, soberbios y prepotentes, no se dan cuenta que están viviendo de los ahorros de los viejos. Todo el progreso, la tecnología y los avances, lo construyeron los que hoy son viejos. Las instituciones, las industrias y el sistema político, los inventos de ayer, las empresas de hoy. ¿Y que han hecho los jóvenes que menosprecian a los viejos?, viven de la renta de los papas, en la casa de los papás, trabajan en la empresa de los papás, gozan del carro, de los papás, conocen el mundo por los papás, viven a la hora y quieren más. ¿Cuál es la soberbia? que nunca van hacer nada, inventar nada, superar a la generación, que creó casi todo, lo que hoy existe, su único consuelo, dedicarse a desarrollar APP, o convertir, las empresas del papá, en empresas punto com, sistematizarlas, de analogías a digitales, simplificar los procesos, a lenguajes binarios, es su valor agregado, pero las instituciones,  el empresariado, la industria, su filosofía, su visión,  su organización, su estructura, su administración, ya existían, no la crearon ellos, nunca podrán igualar a esta generación, ni las anteriores, que abrieron monte y fundaron pueblos, andariega, emprendedora y creativa, ni en sus sueños profundos lo lograrán, mientras tanto, sigan sufriendo de envidia y resentimiento,  con lo viejo, con la generación adulta, porque no les tocó nada real, que inventar, ahí les dejamos, para que sigan desarrollando aplicaciones, que ahora llaman cibernética, robótica e inteligencia artificial, porque de la natural, más bien poco, a ver si al menos hacen buenos hijos, aunque sea por internet, que reconozcan y respeten los valores de los pioneros, entendiendo el sentido y el valor de las mujeres, y les den uso, porque, ni las alzan a mirar, por su naturaleza retro, indefinida e insegura, en algunos casos. Desatentos e irrespetuosos que se creen con derecho a todo, a un mundo que no inventaron, ni se han ganado. Lo único que han inventado, son los genios de hoy, los influencer; los filósofos de la actualidad, unos vagos inútiles desadaptados, que hablan y hacen de todo por llamar la atención, de otros más estúpidos que ellos, que los ven como un ídolos, en un negocio fácil y extraño, una forma de remuneración, y enriquecimiento, fácil y rápido, de que más vivirían. Si siempre han vivido de alguien.