Por: JAIRO HERNÁN RAMÍREZ GÓMEZ

Fueron varios los motivos que desde un principio no cautivaron a muchos ciudadanos para apoyar la convocatoria para revocar al alcalde de Medellín. Lo reflejan las cifras, de 783.820 votantes en las elecciones de 2019, solo se lograron convocar 132.908 firmas válidas.

Entendimos algunos, que las revocatorias inician una vez se posesione el mandatario y que comience a incumplir el Plan de Desarrollo, situación que no ocurrió, pues la logística del trámite se inició por un grupo que se sintió huérfano del poder una vez se conocieron resultados electorales para la alcaldía en 2019.

También incidió en la convocatoria, el lenguaje de odio y polarización que impusieron sus promotores en todos sus eventos, comunicados y convites.

Hasta ayer y con el apoyo de un medio de comunicación local, se magnificaron todas las decisiones por simples que fueran, desorientando a la comunidad, como ejemplo, un Auto se transmitía como si fuera un fallo definitivo y más grave aún, con presiones y amenazas al Consejo Nacional Electoral que, en el caso de no darse una certificación sobre la contabilidad en 48 horas, se iniciaría un incidente de desacato y advertencias de multa y cárcel incluida para todos sus integrantes.

Fueron varios los gremios, dirigentes y movimientos políticos que se embarcaron en el apoyo a la convocatoria; también un sindicato de profesionales que parece haber perdido su norte, al dedicar más tiempo a defender intereses de una clase dirigente y política que antes cuestionaba.

También incidió negativamente al tramite de revocatoria, y a la imagen del concejo de la ciudad, el arribo tardío de un concejal que llegó crecido, haciendo alarde de que la revocatoria ya tenía su asiento en el concejo de la ciudad.

Fueron muchos los que trataron de sacar ventaja política de la revocatoria, hasta un prestigioso columnista y exalcalde, que llego tarde a la cuadrilla, después de la destitución de un gerente de EPM. Parece que también más temprano que tarde tiro la toalla.

A medida que iniciaron los problemas sobre la contabilidad, el exceso de topes, gastos de campaña, entre ellos sillas, camisetas, gorras, los cuestionamientos sobre los honorarios al auditor y a la contadora de la revocatoria, se fue desvaneciendo el entusiasmo y apoyo de los mismos que antes apoyaron con tanto empuje.

Como consecuencia de la anterior, hoy con 7 votos a favor y dos salvamentos, la sala plena del Consejo Nacional Electoral, aprobó la ponencia para hundir la revocatoria por irregularidades en las cuentas Y su financiación. También consideró abrir investigación y formularán cargos al comité promotor.

Queda una lección y también recomendación para revisar los topes de gastos de campaña revocatoria, en este caso de $236 millones, suma pírrica frente a los 313.528 votantes requeridos y los 157.361 a favor de la misma, no alcanzan ni para una empanada o un tinto a cada uno, así sean de cafetería o restaurante de corrientazo.

Lastima que se perdió tanto tiempo, 28 meses, y desgaste de una administración para atender una revocatoria, pero, ya mañana será otro amanecer para los pocos 20 meses que le restan para terminar las obras prometidas y dar solución a problemas de seguridad, desempleo, movilidad y también del aseo para recuperar la Tacita de Plata que perdimos hace varios años.

No sobra por demás, de mi parte, desearle el mayor de los éxitos a estos dirigentes integrantes del comité, que sin medir las consecuencias de su actuación se embarcaron prematuramente en un proceso que parece no dio sus frutos y que también les generó una investigación.

Como lo advertí antes al comité, es hora de sacar la Matriz de Riesgos, cuando hicieron el análisis en caso de un resultado adverso en este proceso.

 También, si es verdad, que saquen el as bajo la manga con los supuestos recursos de ley que dicen tener y continuar con el desgaste político y económico en vez de orientar comunitariamente los esfuerzos en la recuperación económica y la atención de los problemas sociales que son prioritarios.

Un llamado a todas las partes para evitar que estos resultados de referendo se conviertan en el caballo de batalla para las elecciones que se avecinan.

 

ANTIOQUIA UNIDA CONTRA LA CORRUPCIÓN

JAIRO HERNÁN RAMÍREZ GÓMEZ