Por: Luis Fernando Pérez Rojas 

Es una manera maravillosa de celebrar nuestros éxitos y difundir el sentimiento

de comunidad, para afianzar relaciones valóricas en los equipos de trabajo institucional.

Las celebraciones colectivas refuerzan la idea de que un desempeño extraordinario de los equipos de trabajo institucional es fruto de muchas personas.  Celebrar los logros de forma visible y pública crea comunidad y sostiene en la cultura organizacional el espíritu de trabajo en equipo.  Al basar las celebraciones en las actuaciones congruentes con valores esenciales y el logro de hitos importantes, los directivos-líderes contribuyen a que todo el mundo en la institución siga centrado en lo fundamental.

Las interacciones sociales aumentan el compromiso de las personas con los estándares del equipo de trabajo y tienen un profundo efecto en su bienestar.  Cuando se le pide a alguien que vaya más allá de su zona de confort, el apoyo y los ánimos que le den sus compañeros reforzarán su capacidad de soportar los posibles efectos debilitantes del estrés.  Asegúrate de que la gente no vea tu institución como el lugar donde “se muere la diversión y la alegría”.

Un directivo-líder da ejemplo implicándose principalmente en las celebraciones y los reconocimientos, demostrando que alentar el corazón es algo que todo el mundo debería hacer al interior de la organización.  Contar historias sobre personas que han hecho esfuerzos extraordinarios para conseguir éxitos impresionantes para la institución, es una oportunidad de llamar la atención sobre ejemplos que toda la comunidad debería seguir.  Las historias hacen que las experiencias de la gente sean memorables, a veces profundas de un modo que no habían percibido hasta entonces, y sirven como modelo para comportamientos futuros.

Establecer conexiones personales con la gente en una cultura organizacional de la celebración también genera y sostiene la credibilidad institucional.  Reduce las divisiones nosotros-ellos entre un director-líder y los miembros del equipo.  Introducir vitalidad, energía, empatía, sencillez, humildad y un sentimiento sincero de aprecio en el lugar de trabajo es algo esencial. 

Para alentar el corazón, tienes que celebrar los valores y las victorias creando un espíritu de comunidad.  Eso significa que debes:

  • ncontrar y crear ocasiones para reunir a la gente y celebrar públicamente sus logros.
  • Tomar medidas que demuestren que la gente puede “contar contigo” y asegurarte de que se sientan “parte de un todo”.
  • Hacer que una parte del entorno laboral esté llena de diversión y alegría: ríe y pásatelo bien junto a otros.
  • Implicarte personalmente en tantos reconocimientos y celebraciones como sea posible. Demuestra que te preocupas siendo visible durante las épocas difíciles.
  • No dejar pasar nunca la oportunidad de contar públicamente historias reales sobre cómo personas de tu institución u organización han ido más allá del deber de su trabajo y que han dejado un hondo legado.
  • Programar celebraciones y buscar también oportunidades espontáneas para celebrar las victorias con los valores compartidos.

CARACTERÍSTICAS DE LAS PERSONAS AGRADABLES EN LOS EQUIPOS DE TRABAJO

 Nos agradan las personas cuando tenemos un motivo para pensar que ellos, al interior del equipo de trabajo: Mantendrán una relación abierta, honesta y leal.  Fomentarán una familiaridad al ser accesibles en lo emocional.  Proporcionarán atención y aceptación positivas e incondicionales.  Resistirán algunos sacrificios si la relación lo demanda.  Proporcionarán un esfuerzo social en forma de simpatía o empatía.  Participarán en intercambios sociales necesarios para mantener la relación empática en el equipo de trabajo.

FELIZ NAVIDAD 2021

LUIS FERNANDO PÉREZ ROJAS                                                Medellín, diciembre 4 de 2021