Por: Félix Alfázar González Mira

En la médula plena de la campaña hacia la conformación del congreso de la República, se hace necesario ir tomando decisiones sobre los aspirantes que puedan interpretar las ideas, los programas y los proyectos que satisfagan nuestras inquietudes nacionales, las regionales y locales .

Es muy justificada la actitud de amplios números de ciudadanos con respecto al rechazo a las viejas costumbres políticas que encarnan viejos y nuevos activistas de la política. Que corrupción, que promesas incumplidas, que las mieles (mermelada) del poder los atosigan de dinero y pleitesías, que se hacen elegir y luego no se acuerdan del electorado, que no construyen proyectos de ley, que no asisten a debates, que no articulan recursos para las aspiraciones de sus territorios, que no regresan a la tierra ni a saludar y todos los etcéteras conocidos. Todo ello y más es verdad.

Mirando con detenimiento y responsabilidad, como demanda el momento histórico-político que estamos atravesando, en la seguridad que debemos elegir un congreso de excelencia que construya, impulse y apruebe las urgentes reformas que demanda el estado colombiano, que no tenga visos de las prácticas que la opinión pública rechaza en sus dirigentes, que despierten esperanzas ciertas en los ciudadanos sobre llevarnos a niveles superiores de bienestar y desarrollo y que definitivamente el congreso de La República vuelva por los senderos del debate profundo de las ideas, con elementos académicos que las acompañen, con la brillantez de las mentes que le han dado lustre. Que no siga siendo un antro de transacciones mermeladezcas, de coimas y porcentajes de contratos, de tramados burocráticos. Queremos decir que vuelva a ser el faro, guía, formador y orientador de la República. Como el de antaño cuando las mentes más brillantes iluminaban, no solamente el recinto, sino que con su antorcha también lo hacían en el amplio cielo de la patria.

Produce entre miedo y pesar observar las fotografías donde aparecen los que se creen ya triunfadores en las urnas al lado de Gustavo Petro, representando lo peor del ejercicio político, lo más despreciable por los ciudadanos: Roy Barreras, Gustavo Bolívar, Armando Benedetti, Pizarro, Farc, Piedad Córdoba, Iván Cepeda y no sale en la foto el ELN. ¡Qué tal el barco de nuestra Colombia capitaneado por esta tripulación!!?? ¡No lo quiera Dios, entraría el agua a borbotones para hacerlo naufragar!!!

Por fortuna y las esperanzas son lo último que se pierde, tenemos un buen abanico de aspirantes de esta tierra arrugada que son un postigo de luz en medio de la oscuridad que representan los señalados arriba.

Existen partidos y movimientos que defienden y alientan el estado liberal, la libre empresa, la iniciativa privada, el capitalismo social, el estado austero, la seguridad como valor democrático, relaciones fraternas , en suma, las libertades plenas.

Existen otros que defienden lo contrario, el autoritarismo , el partido único, coartar la iniciativa privada, el comunismo con violencia , el socialismo con regulaciones, la anarquía , las expropiaciones, la lucha de clases, la empobrecedora emisión de moneda, cerrar la economía y consolidar más  una narrativa populista que realizaciones sociales ciertas.

En el horizonte de aspirantes al congreso tenemos representantes de los dos bloques con personas muy brillantes y otras no tanto. Como en la Biblia, de todo hay en la viña del Señor. Pero una situación circunstancialmente histórica si es cierta: el único partido político colombiano que se ha convertido en el muro que contiene la borrasca que se cierne sobre la patria y que ha cobijado a algunos vecinos , es el Centro Democrático con su Jefe y mentor. Algunos siguen creyendo, bobaliconamente, que es un juego la famosa ” brisa bolivariana ” del foro de Sao Paolo ahora reparada en el foro de Puebla.

Por ello debemos salir todos los ciudadanos a borbotones, a llenar esas urnas de votos con los candidatos a senado y cámara que encarnen los valores del estado de derecho y fortalecer ese dique de contención para volver impenetrable de aguas oscuras a esta democracia colombiana que a pesar de lo que falta, es el camino en libertad para seguirla construyendo para bien de sus asociados.

Decía George Orwell : ” Un pueblo que elije corruptos, inservibles, cínicos y traidores no es víctima, es COMPLICE”.

Avanzando en la dirección que señalo invito a votar por candidatos del Centro Democrático para aumentar las curules en las dos cámaras con gente impoluta y honrada. Personalmente lo haré para la cámara baja por el doctor Óscar Dario Pérez Pineda por la tranquilidad producida al saber que las finanzas y la hacienda pública tienen en él el mejor guardián. Y para el senado por el doctor Andrés Guerra Hoyos que interpreta la aspiración de las regiones de Colombia, de Antioquia y de nuestra zona Occidental del  departamento.

No seamos COMPLICES en estos tiempos aciagos de la patria. ¡Sigamos siendo constructores en libertad!

 

La JEP dice que 2021 es el año más violento desde firma de la paz en Colombia

Bogotá, 18 feb (EFE).- La Unidad de Investigación y Acusación (UIA) de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) dijo este viernes que en Colombia hubo 329 muertes violentas en 2021, cifra que convierte a ese año en el más violento desde que se firmó el acuerdo de paz entre el Gobierno y las extintas FARC, en 2016.

Según las cifras provenientes del Mecanismo Unificado de Monitoreo de Riesgos presentadas por la UIA, en el 2021 se registraron “329 muertes violentas ocasionadas en el marco del conflicto armado en el país. De estas, 24 corresponden a civiles y 89 a miembros de la fuerza pública”.

De acuerdo con la UIA (Fiscalía de la JEP), en ese año hubo el mayor número de masacres, 93. En 2017 reportó 19 casos; en 2018 fueron 26; en 2019 la cifra llegó a 21; 2020 representó un crecimiento crítico hasta llegar a 71; y 2021 hubo 93 masacres en el país.

También en el 2021 se registraron 228 combates entre fuerza pública y grupos armados ilegales y 134 hostigamientos a militares y policías. Además, los grupos armados ilegales reclutaron 89 niños para incorporarlos a sus filas.

La UIA detalla en su información que actualmente existen tres grupos armados ilegales con amplia organización en el país: el Ejército de Liberación Nacional (ELN), con presencia en 294 municipios del país, las disidencias de las FARC, que ya presentan 28 frentes o columnas móviles, y el Clan del Golfo, la mayor banda criminal del país de origen paramilitar.

Dentro de su informe, la UIA también reportó el aumento en hechos que podrían constituir graves infracciones al Derecho Internacional Humanitario (DIH). Por ejemplo, durante 2021 el Clan del Golfo presentó 157 “posibles infracciones”, frente a 149 de las disidencias de la guerrilla y 123 del ELN.

La mayoría de las posibles infracciones al DIH se dieron por utilización de armas prohibidas como artefactos explosivos que “impiden dirigirse a un objetivo específico”. EFE

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Luis Pérez – Presidente

El Revolucionario de las nuevas economías