Bogotá, 8 ago (EFE).- Las autoridades colombianas capturaron a Aldemar Soto, un desmovilizado de las FARC solicitado en extradición por Estados Unidos, en donde se le acusa de tráfico de estupefacientes, informó este jueves la Fiscalía.
El ente acusador indicó en un mensaje de Twitter que, además de Soto, también fue capturado Alfredo Molano Cuitiva y que ambos son “solicitados por la Corte de Columbia, EE.UU., por tráfico estupefacientes a nivel transnacional”.
La Fiscalía explicó que la Oficina del Alto Comisionado para la Paz certificó que Soto hizo parte de las FARC y que “se acogió a acuerdos de paz y tenía libertad condicional”.
Soto, conocido con el alias de “El Ingeniero”, era integrante de la columna móvil Teófilo Forero de las FARC, una de las más violentas de la antigua guerrilla y se había acogido a la Justicia Especial para la Paz (JEP), encargada de juzgar los crímenes cometidos con ocasión del conflicto armado en el país.
El exguerrillero fue capturado en 2011 en el departamento del Caquetá (sur) y había sido condenado en ausencia a 20 años de prisión por ser uno de los responsables de activar una “casa bomba” en la ciudad de Neiva (sur), que causó la muerte de una fiscal, nueve policías, dos niños y tres adultos, en hechos ocurridos en febrero de 2003.
La explosión, que ocurrió un día antes de que el entonces presidente colombiano Álvaro Uribe visitara la zona, dejó heridas a más de 50 personas y destruyó más de 60 viviendas del sector, informó en esa oportunidad la Fiscalía.
Sin embargo, en mayo de 2017 “El Ingeniero” salió en libertad condicional de la cárcel La Picota, de Bogotá, tras someterse al acuerdo de paz firmado entre el Gobierno colombiano y las FARC, hoy convertidas en partido político.
El presidente colombiano, Iván Duque, ha dicho en varias oportunidades que todas las personas que se mantengan en su proceso de reincorporación recibirán el apoyo y las garantías del Estado, pero quienes reincidan en las actividades criminales deberán recibir todo el peso de la ley. EFE