Medellín (Colombia), 15 ago (EFE).- El Túnel de Oriente, que con 8,2 kilómetros de longitud se convirtió en el túnel vial más largo en operación en América Latina, fue inaugurado este jueves por el presidente colombiano, Iván Duque, quien se encargó de encabezar el primer recorrido.
La megaobra, denominada Conexión Vial Aburrá Oriente-Túnel de Oriente, conecta al Área Metropolitana del Valle de Aburrá con el Valle de San Nicolás, dos regiones estratégicas del departamento de Antioquia (noroeste).
“Esta es una obra emblemática que muestra lo mejor de nuestra ingeniería y de nuestra capacidad creativa”, expresó Duque en la ceremonia de inauguración, en la que destacó la unión entre el sector privado y público para la consecución de la obra que costó cerca de un billón de pesos (unos 288 millones de dólares de hoy).
La obra fue construida por la concesión vial Túnel de Oriente, compuesta por 74 empresas, entre otras, AIA arquitectos e ingenieros asociados, El Cóndor, Topco y Estyma.
“La lógica de la ingeniería, la ética del respeto por el medioambiente y la estética de una obra que es hoy admirada por todos los colombianos”, apostilló Duque, quien indicó que su construcción se hizo cuidando el “patrimonio de acuíferos y el patrimonio de la montaña”
“Permitió un diseño donde la infraestructura bordea la naturaleza sin dañarla”, destacó el mandatario del proyecto del que excavaron 17.376 metros de túneles en cuatro años.
Duque, conduciendo uno de los vehículos, encabezó una caravana que estrenó oficialmente la vía con la participación de carros antiguos que recorrieron el proyecto que contempla la construcción de 22,3 kilómetros, entre túneles, viaductos e intercambios viales.
Con la apertura de la obra, compuesta por el Túnel Seminario, Túnel Santa Elena 1 y Túnel Santa Elena 2, además de los 6 kilómetros de vías a cielo abierto, el tiempo de circulación desde Medellín hasta ese aeropuerto internacional José María Córdova pasó de 45 minutos a 18 minutos.
El gobernador de Antioquia, Luis Pérez, calificó como un “proyecto revolucionario” y dijo sentirse “orgulloso” de esta obra y de entregarle a Antioquia y a Colombia un “nuevo símbolo de la movilidad y la ingeniería”.
“Este tipo de obras nos sacan de la pobreza, aumentan la calidad de vida y mejoran las condiciones económicas”, apostilló Pérez.
La obra inicia en Medellín, en el sector Baltimore, en la doble calzada Las Palmas, con un intercambio vial compuesto por dos viaductos, cuya longitud es de 176 metros, y que permitirá acceder al Túnel Seminario, que tiene una longitud de 800 metros.
En esta megaobra cuenta, según sus constructores, con altos estándares de seguridad, entre ellos destaca un sistema de ventilación, sistema contra incendios y la realización de una vía de escape para emergencias y que a futuro funcionará como una segunda calzada para tráfico en un único sentido.
Según las proyecciones del secretario de infraestructura de Antioquia, Gilberto Quintero, por este proyecto “transitarán unos 16.000 vehículos al día”, además permitirá el crecimiento industrial, comercial y turístico.
La multinacional española Indra, que ha liderado la modernización tecnológica de la movilidad de Medellín en los últimos años, se encargó que desarrollar el sistema de Detección Automática de Incidentes (DAI), compuesto por 109 cámaras, que estará interconectado para atender cualquier emergencia.
“Estamos orgullosos de haber participado en este gran proyecto con una solución que va a garantizar la seguridad y la salvaguarda de todos los usuarios del túnel”, expresó a Efe el director de transporte de Indra en Colombia, Walid David. EFE